Sigo contándoles más de los desfiles de la Fashion Week Milano S/S 2013 pues como les decía en el post anterior, me encontré con mucha más propuesta de diseño aquí que en las Fashion Week de las otras capitales de la moda.
Domenico Dolce y Stefano Gabbana - Dolce & Gabbana - se siguen inspirando en la Sicilia de los años cincuenta. Destacan sobre todo los diseños textiles y la paleta explosiva. Con una clara inspiración en los Pupi palermitanos (marionetas tradicionales de la región de Palermo) y en la cerámica de las Islas Eolias, las telas de la colección fueron la mayor sorpresa. Los dos creadores de la célebre marca también utilizaron rafia y paja trenzadas para crear vestidos y accesorios, bordados con corales o con flores de seda aplicadas. Los bolsos combinan cuero y PVC trenzado que imita fibras vegetales. Esta colección primavera verano, ultrafotogénica, se inscribe en la campaña de promoción de la cultura italiana y de las raíces sicilianas llevada a cabo por Dolce & Gabbana. En este sentido, también abrieron una boutique en el 16 Corso Venezia en Milán que no se parece a ninguna otra del mundo en donde ofrecen sus prendas en telas únicas y sus productos de belleza y cosmética en exclusividad. Se trata de un concepto a medida que irán adaptando en las grandes metrópolis a través del planeta fashion y parece que la siguiente parada sería New York…
La talentosa Consuelo Castiglioni, al frente de Marni, presentó un desfile perfectamente equilibrado entre saturación gráfica a base de tramas de cuadros de diversos colores y bloques planos de color. La base de estos cuadrillés es una tela de algodón blanco gruesa que le permitió a la diseñadora crear equipos en línea A con mucha estructura. El cuero también es utilizado de la misma forma y se aprovecha su rigidez. Son notables los equipos trabajados enteramente en cuero con diferentes acabados. Los croco son increíbles! Hay vestidos y faldas amplias y algunas más cerradas pero la combinación de casacas/piloto y faldas es la que confiere toda la nobleza a esta colección moderna en la ejecución pero con guiños al pasado en las morfologías. Resalta sobre todo un la perfección en la confección y el espíritu couture de todas las prendas. Un gran acierto para Marni.
Para Trussardi, la androginia discreta del guardarropas diseñado por Umit Benan Sahin para esta próxima estación cálida mezcla el refinamiento de un vestido chemisier en seda color marfil de un clasicismo sin errores con bermudas o tailleur-pantalon con chaquetas cruzadas que dan prueba que los valores tradicionales de la confección son un refugio para la marca. Otro de los atractivos de la colección es la paleta. Reducida pero intensa. Los cuatro o cinco colores que utiliza están perfectamente equilibrados y son exquisitos, sobre todo los azules y los habano-anaranjados. A destacar la perfecta confección de los pantalones y el supremo trabajo del cuero. No podría ser de otra forma para Trussardi.
